martes, marzo 10, 2009

¡POR FIN!





En un pueblo en cuanto sales por la puerta de casa te enteras de cualquier novedad, así que el sábado a primera hora cuando me crucé con Bernardo, el albañil, (porque por esas tierras de la mancha todos llevan coletilla detrás del nombre), enseguida me puso al día de las novedades: "unos guachos están en el río enseñando a que lo cuidemos...". No las tenía todas conmigo, la verdad, porque andábamos buscando algo así, ya que, en concreto, en este pueblo nuestro, hay un vertido y toda la porquería va a parar al río porque no hay depuradora, es algo que nos tiene casi obsesionados, no entendemos como esto todavía puede suceder a estas alturas. Allí que vamos Pedro y yo, y si, ¡por fin!, un grupo de jóvenes que se dedica a informar, vigilar y limpiar el río. En dos minutos nos hicimos voluntarios ambientales de Adiman que es como se llama la organización. Les acompañamos a analizar el agua a unos 20 metros del vertido y como veis en las fotos nos encontramos con un río totalmente muerto. Asfixiado.
Es algo muy interesante y curioso ver la vida que hay en una piedra del río, jamás lo hubiera pensado, y uno de los chicos nos explicó como se llama cada uno de los insectos que había viviendo en la piedra, antes del vertido, y como las piedras después del vertido están muertas, negras. Con la boca abierta nos quedamos. Además nos pusieron al día de las especies que habitan en el Júcar. Así que ya tenemos trabajo que hacer, a ver si conseguimos deshacer el empastre. Ahora a estudiar los ríos, que me dicen que hay tanto que no sé sobre ellos y no me lo hubiera creído, todo un mundo al que no se le sabe dar el valor que tiene.
Conocimos al cartero del pueblo de al lado, Antonio, que se dedica a acompañar a su hijo de 14 años a todos los jaleos medioambientales en los que anda metido y de paso va a hacer llegar a un chico que vive en el otro pueblo, nuestro correo, lo andamos buscando desde hace un tiempo, porque nos han dicho que está metido también en el cuidado del medio ambiente, a ver si entre todos podemos conseguir salvar esta maravilla natural.
Fotos: Una piedra con vida y el resto en el vertido.

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